Artículo de revisión sobre las distintas clases de cerraduras de tipo electromecánico que se pueden encontrar en la actualidad: cerradura electrónica, eléctrica, digital e inteligente. Principios básicos técnicos sobre su arquitectura interna, funcionamiento, características esenciales, y un amplio análisis de sus principales ventajas e inconvenientes, así como algunas recomendaciones sobre su uso e instalación en hogares, oficinas, edificios residenciales y otros lugares.
Cuando comencé a interesarme en las cerraduras modernas, hace ya algunos años, descubrí que había diferentes maneras de referirse a ellas: cerradura eléctrica, cerradura electrónica, cerradura digital y cerradura inteligente.
Al principio pensaba que solo eran distintas denominaciones para referirse a un mismo tipo de cerradura. Pero, a medida que fui investigando, me di cuenta de que estaba equivocado.
Lo cierto es que todas aquellas cerraduras que emplean la electricidad para su funcionamiento forman parte, genéricamente, de un mismo grupo llamado cerraduras electromecánicas.
Sin embargo, dentro de esta categoría, la evolución tecnológica ha hecho necesaria una denominación específica para poder diferenciar y nombrar correctamente cada una de las diferentes clases de cerraduras electromecánicas.
Te invito a hacer un recorrido por las distintas cerraduras que utilizan la electricidad para su funcionamiento. Desde las cerraduras eléctricas más sencillas, pasando por las cerraduras electrónicas analógicas y digitales, hasta llegar a las cerraduras inteligentes.
Cerradura eléctrica
Una cerradura eléctrica es, en esencia, una chapa manual, a la que se le ha añadido un circuito eléctrico muy elemental, formado por un transformador, unas bobinas y un interruptor. Por medio de este circuito, una vez conectado a la red eléctrica, podremos desbloquear magnéticamente el pestillo de la cerradura, al accionar el interruptor.
El problema de las cerraduras eléctricas es que su funcionamiento es demasiado básico: solo cumplen una función (desbloqueo o bloqueo), y carecen de circuitos integrados o sensores que permitan más acciones, como la configuración de otros sistemas de acceso, apertura a distancia o registro de usuarios. Por otra parte, su alto consumo energético obliga a conectarlas, mediante cableado, a la red eléctrica. En caso de corte de luz, la chapa dejará de funcionar de forma eléctrica, aunque podrá abrirse manualmente con su correspondiente llave. Y su circuito es muy vulnerable frente a picos de tensión por sobrecargas o caída de rayos, durante una tormenta eléctrica.
¿Dónde se recomienda instalar una cerradura eléctrica?
Las cerraduras eléctricas para puertas son muy económicas y de gran resistencia a la intemperie, por lo que resultan idóneas para su instalación en exteriores. Seguramente, ya te habrás dado cuenta de que muchos de los edificios residenciales, equipados con interfonos, emplean esta clase de cerraduras.
Son las más indicadas para dar acceso a visitantes desde una recepción, como en el caso de oficinas o consultorios médicos. Y, como antes te mencionaba, para departamentos y residencias equipadas con algún interruptor o interfono.
Las cerraduras eléctricas más populares son las del grupo Assa Abloy, un grupo empresarial que reúne diferentes marcas de renombre de todo el mundo. Seguro que conoces las cerraduras Yale, Philips, Tesa o Multi-T-Lock, por nombrar algunas de sus principales marcas.
Cerradura electrónica
Si echas un vistazo al interior de una cerradura electrónica, verás que se ha sustituido el sencillo circuito que encontrábamos en la cerradura eléctrica, por un complejo circuito impreso en una placa.
Este circuito está formado por disipadores, diodos, transistores, etcétera, haciendo posible el empleo de la energía eléctrica para realizar operaciones más complicadas que el simple desbloqueo del pestillo de la cerradura.
Dentro de la misma categoría de cerraduras electrónicas, conviene hacer distinción entre las cerraduras electrónicas analógicas y las electrónicas digitales, que son más modernas y avanzadas.
La cerradura electrónica es notablemente más completa y multimodal que cualquier cerradura eléctrica, ya que pueden bloquearse y desbloquearse e integrar diversos métodos de acceso, como teclados numéricos, lectores RFID, o funcionar a distancia con un control remoto.
La desventaja de los circuitos analógicos, comparados con los digitales, es que son más complicados en su fabricación y sus componentes sufren un deterioro más acelerado.
Al tratarse de una onda, la señal analógica todavía es sensible a interferencias, y su funcionamiento pudiera verse afectado por «ruido técnico», como descargas durante una tormenta u otros dispositivos próximos, que emitan un campo eléctrico.
Por lo general, las cerraduras electrónicas analógicas disponen dos métodos de acceso: contraseña numérica, que se introduce en un teclado físico, y mediante llave mecánica, para una apertura manual de su mecanismo.
A pesar de que la cerradura electrónica analógica se ha visto superada tecnológicamente por las cerradura digital, todavía tienen mucho éxito.
El mejor ejemplo son las cerraduras electrónicas de la marca Kwikset, que gozan de gran popularidad y son muy solicitadas en todo el mundo.
En su web oficial en español puedes ver su completo catálogo de cerraduras electrónicas.
Cerradura digital
Debido a que un pequeño chip puede contener varios circuitos, las cerraduras digitales son dispositivos que integran toda una asombrosa gama de funciones en apenas un reducido espacio, y con un mínimo gasto de energía.
Si recuerdas, el funcionamiento de los circuitos eléctricos y analógicos se podía ver alterado si eran expuestos a alguna fuente de ruido técnico. En el caso de los chips digitales, estos no se ven afectados por interferencias que pudieran afectar su rendimiento.
A diferencia de las cerraduras eléctricas, que requieren suministro eléctrico por medio de cableado, las cerraduras digitales asombran por su mínimo consumo energético.
Con apenas 6V (4 pilas tipo AA), las cerraduras digitales son capaces de hacer funcionar sus sensores y sistemas, durante casi todo un año, sin necesidad de reemplazar las baterías.
Por calidad y diseño, debo confesarte que los cerrojos y cerraduras digitales Samsung Smart Lock son mi debilidad.
Son dispositivos que adornan tu puerta con un toque de elegancia, gracias a su innovador diseño y materiales de gran calidad.
Y cuentan con funciones en seguridad adicionales, como la doble autenticación o el modo «Away» para ausencias prolongadas.
Múltiples métodos de acceso y funciones extra
Las cerraduras digitales suponen un gran salto tecnológico, respecto a las cerraduras electrónicas. Estos dispositivos incluyen muchas más opciones en cuanto a métodos de acceso: contraseña numérica, antena para tarjeta RFID y lector de huella digital. Incluso, pueden llegar a incorporar sensores de temperatura y movimiento, alarma anti intrusos, y apertura mecánica mediante llave de seguridad.
Cerradura inteligente
A pesar de ser el término más usado para referirnos a las cerraduras electrónicas de última generación, lo cierto es que no hay un consenso general respecto a qué requisitos debe cumplir una cerradura inteligente para diferenciarla de una cerradura digital.
Particularmente, cuando hablo de cerraduras inteligentes, me estoy refiriendo a aquellas cerraduras con conectividad WiFi o bluetooth, que pueden controlarse desde un smartphone, un asistente de voz y son capaces de integrarse en una red domótica.
La principal característica de este tipo de cerraduras es que, una vez enlazada a una red WiFi, o emparejada mediante Bluetooth como nuestro celular, podremos conectarnos a la cerradura inteligente y controlarla desde una app.
De esta forma, será posible desbloquear remotamente la cerradura desde la pantalla del smartphone, sin importar qué tan lejos estemos de la puerta.
Al conectarla a nuestra red WiFi, tendremos acceso a la cerradura desde cualquier lugar del mundo, siempre que nuestro celular esté conectado a internet. Y recibiremos notificaciones instantáneas de todos los accesos que se produzcan en casa.
Cerradura inteligente y smartphone, un «amor a distancia».
A través de la app no solo podemos desbloquear la cerradura inteligente, también tenemos la opción de generar distintos códigos de acceso personalizado, con validez y compartirlos con la familia, amigos y empleados del hogar, usando cualquiera de las aplicaciones de chat y mensajería.
Las cerraduras inteligentes WiFi son de gran utilidad para aquellas personas que rentan alguna propiedad en Airbnb. La posibilidad de generar códigos de acceso adaptados a los periodos de estancia de sus huéspedes, y de compartirlos desde la pantalla del celular, supone un gran ahorro de tiempo en desplazamientos.
Si te decides por una cerradura inteligente WiFi, tienes incontables opciones para que encuentres la que más se adapte a tu presupuesto.
Pero si quieres conocer cuáles son los modelos que ocupan actualmente las tres primeras posiciones en mi top personal, aquí las tienes: la cerradura inteligente Samsung SHP-DP609, la cerradura inteligente EXC-SP600 y la cerradura inteligente Yale YMF40-A.
Además de controlarla desde su app, algunas cerraduras inteligentes WiFi también permiten la utilización de un asistente virtual para que nos informe de su estado y bloquearla o desbloquearla mediante comandos de voz.
Por ejemplo, la cerradura inteligente Samsung SHP-A30 es compatible con los principales asistentes de voz: Google Assistant y Alexa.
Esta cerradura inteligente WiFi tipo cerrojo también cuenta con lector de huellas para autenticación biométrica de usuarios. Conoce a fondo la Samsung SHP-A30 leyendo nuestro artículo comparativo.